QUIENES SOMOS

MIMIEL, es el resultado del esfuerzo y dedicación de las abejas y de los apicultores Reme Gutiérrez y Salvador Escobar; desde hace mucho tiempo amantes de la Naturaleza y lo natural.

No contiene aditivos ni tratamientos de ningún tipo. No se calienta ni procesa. Se envasa directamente desde los panales.

Nuestras abejas recolectan el néctar y los mielatos de cerezos, castaños, brezos, robles, encinas y se enriquece con muchas otras especies. Esta combinación le confiere un sabor peculiar que la distingue.


martes, 19 de octubre de 2021

LA RECOLECCIÓN DEL 2021

    

El pasado día 22  de septiembre, decidimos que era el adecuado para sacar la producción del año. Ya hace algunos ejercicios que sólo hacemos una extracción y la verdad es que tanto la producción como la variación de las floraciones, tienen una incidencia escasa en la cantidad y calidad de nuestra miel. Como siempre, nos cuestionamos la procedencia del momento por el hecho cierto de que la producción de mielato en las encinas estaba en pleno apogeo.

Los resultados han sido muy satisfactorios. La producción media por colmena ha superado los 15 kgr. y ello teniendo en cuenta que algunas colmenas eran de enjambres de este mismo año. 

 Como siempre, hemos contado con la colaboración de nuestros compañeros y amigos Natalia y Alvaro sin cuya presencia todo habría resultado distinto.

Inserto a continuación un pequeño video grabado durante el proceso. No es de mucha calidad por las especiales circunstancias en las que realizamos las grabaciones.


Una vez extraídos los cuadros procedemos como siempre a la operación del "desoperculado" para retirar la cera que cierra la celdilla con su dulce contenido.

Ya vemos en el siguiente video como realizamos el desoperculado.

Y este es el resultado, cuadros sin cera y cargados con la miel.

Cuadros con y sin opérculo.


Tras ser centrifugados, se recoge el resultado en los cubos desde los que se vierten a los decantadores.
 
                                  

En cada depósito decantador disponemos un filtro para que todos los residuos existentes (restos de cera, polen, etc.) puedan ser retirados. En estos depósitos de maduración permanecerá la miel durante unas semanas para que concluya su proceso de limpieza, ya por simple gravedad, teniendo en cuenta que la propia densidad de la miel va a favorecer que todos los restos asciendan hasta la superficie.

                                            

                            

Libando la miel caída

Una vez en los depósitos la totalidad de la miel, todos los cuadros viejos son retirados e introducidos en la caldera/cerificadora para recuperar y reutilizar las ceras. En otra ocasión, nos detendremos más despacio en este proceso. Insertamos a continuación el resultado de la recuperación de las ceras.


Ciertamente el procedimiento es largo y minucioso; pero como siempre, la satisfacción y los resultados compensan de sobra el trabajo realizado. Recogemos las ropas y las metemos en la lavadora.


Raspamos y pasamos el soplete a las alzas y aprovechamos para repasar de pinturas y numeración a todas ellas.


Y......... hasta la próxima campaña.